"Bastos eran los horizontes que se divisaban desde aquellos lares, desolados e historicos, donde un antiguo muelle se sostenía imponente a pesar del pasar de los años, las olas chocaban imponentes contra este como si desearan derribarle, y echarle de sus propiedades, pero como eterno pilar este se mantenía, un amanecer, hasta el anochecer una silueta se mantenía en pie, silencioso y expectante a algo que parecía jamás venir, se encontraba un muchacho de cabellos rojizos, de mirada tan placida como el propio panorama que observaba, mientras sus cabellos eran ondeados y la luna apenas se asomaba entre las montañas lejanas, sus labios se encontraban entreabiertos como si desease expresar algo pero se mantenían quietos por ahora, mientras el delgado caballero vestía una camisa blanca de botones, y pantalones negros elegantes dejando sus zapatillas negras en una de sus manos, mientras algunas gotas del cristalino liquido mojaban su rostro, y entonces finalmente sus labios se movieron para pronunciar-...
"Aeternus Vita"